Si sueles viajar en avión, seguramente habrás vivido alguna vez una desagradable sensación de dolor en los oídos, justo en el momento de aterrizar. Te explicamos el por qué de esta dolencia y algunos tips para evitarlo en la medida de lo posible.

Causas

Los cambios de presión que se producen en el avión afectan a nuestros oídos. Estos cambios bruscos, provocan traumatismos que, dan lugar al síntoma conocido como barotrauma, que se puede producir también durante el buceo, el paracaidismo, el uso de cámaras hiperbáricas y en los viajes de avión. En el barotrauma se presentan síntomas que van desde la sensación de taponamiento, pasando por una leve sordera (hipoacusia), la escucha de ruidos graves en el oído (acúfenos), para progresar a dolor y en los casos más graves, darse ruptura del tímpano y sangrado, e incluso algún vértigo.

La trompa de Eustaquio conecta el oído con la parte posterior de la boca. Dentro de la trompa hay unas burbujas de aire en constante movimiento, que equilibran la presión interna del oído. Cuando estas burbujas se bloquean por un cambio de presión, tiene lugar el barotrauma. Cuando viajamos en avión, el mayor cambio de presión en nuestros oídos se produce en el momento del aterrizaje, que es cuando se produce un cambio de presión en el oído, creando un vacío que empuja el tímpano hacia fuera. En función de la presión puede producirse desde un leve taponamiento, hasta un dolor agudo e incluso sangrado.

Las personas que presentan una obstrucción en la trompa de Eustaquio, debida a un resfriado o una inflamación de la mucosa por alergias, son más propensas a sufrir este síntoma, ya que dicha obstrucción dificulta la labor de compensar la presión.

Síntomas del barotrauma

– Dolor de oído.

– Sensación de oídos comprimidos y taponamiento.

– Ligera pérdida de audición.

Los casos más graves de barotrauma pueden incluir síntomas más graves durante varios días:

– Derrame de líquido seroso.

– Sangrado.

– Taponamiento prolongado.

– Mayor pérdida de audición.

– Posible desgarro del tímpano.

Los casos extremos, pueden afectar al centro del equilibrio, produciendo mareo y vértigo.

Consejos para evitar el barotrauma

Para que los cambios de presión que se producen al aterrizar no causen problemas a tus oídos, te recomendamos seguir los siguientes consejos:

  1. Es conveniente regular la presión durante todo el viaje. En el despegue y sobre todo al aterrizar, es cuando el cambio de presión es más brusco, pero a lo largo de todo el trayecto se debe ventilar el oído con bostezos, movimientos mandibulares, masticando o bebiendo agua frecuentemente. En los niños más pequeños la succión del chupete o el biberón puede ser suficiente y en los adultos masticar un chicle puede ayudar.
  2. Intenta mantenerte despierto para compensar la presión. Durante el sueño, nuestro mecanismo de deglución está ralentizado.
  3. Maniobra de Valsalva. Tapa la nariz y la boca y sopla aumentando la presión en faringe. Esto es lo que se denomina maniobra de Valsalva, que ayuda a ventilar el oído interno.
  4. Evita utilizar el avión para desplazarte si estás sufriendo de catarro agudo o episodio alérgico activo. Si no es posible, deberás recurrir a la medicación adecuada, como antihistamínicos y vasoconstrictores, con el fin de tratar la mucosa nasal. Es importante también tener en cuenta que, si existen cirugías recientes en el oído, el viaje en avión no es lo más adecuado.
  5. En el caso de derrame de líquido en el oído interno, el es posible que tu médico te recomiende un tratamiento con antihistamínicos, corticoides o antibióticos, con el fin de que el derrame no se infecte.

Este tipo de lesiones suelen sanar por sí solas en la mayoría de los casos, aunque será necesario un seguimiento médico para asegurar que todo está orden. Si tienes en cuenta nuestros consejos para realizar durante el vuelo, reducirás las probabilidades de sufrir este molesto síntoma. ¡Te deseamos un feliz viaje!