Nuestros ojos necesitan lágrimas constantemente para estar saludables. Cuando esto no se produce, es decir, cuando nuestros ojos no son capaces de fabricar suficientes lágrimas o cuando las lágrimas no contienen la combinación adecuada, se produce lo que conocemos como Ojo seco, enfermedad que afecta aproximadamente a un 30% de la población.


Más técnicamente, el ojo seco es una enfermedad multifactorial, compleja y crónica que afecta a la superficie ocular. Sus principales consecuencias abarcan desde una irritación ocular leve pero constante a una inflamación significativa, incluso cicatrices en la superficie frontal del ojo. Estas consecuencias variarán en función del grado de severidad.
¿Por qué se produce el Ojo seco?
Existen muy diversas causas que provocan este síndrome y pueden darse de forma aislada o converger con varias de ellas. Los factores de riesgo más comunes serían:
- Hormonales, tanto en adolescencia como en menopausia.
- Envejecimiento (afecta casi al 100% de la población en edades avanzadas)
- Uso de ordenador/dispositivos digitales diariamente
- Uso de lentes de contacto
- Ambientes internos: aires acondicionados, ventiladores o calefacciones.
- Ambientes externos: climas áridos, baja humedad o fuerte contaminación.
- Factores alimenticios (déficit vitamínico)
- Consumo de fármacos que incluyan antihistamínicos o antidepresivos.
- Trastornos como el lagoftalmos, que provoca el cierre incompleto del párpado al dormir o parpadear.
- Fumar
¿Cuáles son los tipos de ojo seco hay?
A través de un correcto examen oftalmológico exhaustivo y pruebas diagnósticas específicas se determinará el tipo de ojo seco y tratamiento específico necesario. Existen distintos tipos:
- ACUODEFICIENTE: Cuando se disminuye la producción de lágrimas.
- EVAPORATIVO: Cuando se evapora demasiado rápido la lágrima. Es el tipo más frecuente.
- INFLAMATORIO: Inflamación clínica o subclínica. Afecta a la mayoría de pacientes con ojo seco.
- NEUROTRÓFICO: Cuando el déficit en el conjunto de las acciones nerviosas de la córnea, limita la secreción de lágrima y la regeneración de la superficie ocular.
- NEUROPÁTICO: Cuando se altera el conjunto de acciones de la córnea, esto provoca una gran variedad de síntomas relacionados con el ojo seco.
¿Principales síntomas?
- Sensación de sequedad y quemazón
- Picor/ Escozor
- Rojez
- Sensación de quemazón
- Ojos fatigados y doloridos
- Pesadez en los párpados
- Visión borrosa
- Fotofobia (intolerancia anormal a la luz)
¿Cómo tratar y prevenir el ojo seco?
Dependiendo del diagnóstico y tipo de ojo seco, se requerirá un tratamiento u otro diseñado exclusivamente a medida del paciente. En Blú Servicios Ópticos Auditivos realizamos exámenes exhaustivos en los que se identifica al detalle el tipo de ojo seco y medidas para solucionarlo.
Aún así, y debido al carácter crónico de esta enfermedad, su control y solución no acaba al salir de la consulta. El paciente debe tener en cuenta una serie de pautas como:
- Una buena higiene palpebral (del párpado) mediante calor y masajes con jabón o toallitas específicas.
- Precaución extrema en el caso de usar lentes de contacto, tanto en el tipo de lentilla como en su uso y mantenimiento.
- Evitar calefacciones y aires acondicionados.
- Aumentar el uso de humificadores, proteger los ojos con gafas e hidratarlos con lágrimas artificiales
- Suplementar con ácidos grasos omega 3 para mejorar la composición de la lágrima.
- Realizar descansos visuales cada 20 minutos y evitar frotarse los ojos.