Quizás no hayas oído nunca hablar del glaucoma, pero seguramente lo padezca más gente de tu alrededor de la que imaginas. Para empezar, vamos a explicar en qué consiste esta enfermedad; la afección del glaucoma es causada debido a que el sistema de drenaje del ojo se tapa y el fluido intraocular no puede drenar. Al acumularse, causa un aumento de presión en el interior del ojo que daña al nervio óptico que es muy sensible, llevando a la pérdida de la visión.

Pese a la creencia habitual de pensar que surge en relación con la edad, nada más lejos de la realidad, esta enfermedad puede afectar por igual a bebés, niños hasta adultos, aunque bien es cierto que a partir de los 60 años es cuando puede surgir con mayor probabilidad. Asimismo, factores como el hereditario, personas afectadas por diabetes o con presión intraocular elevada, pueden ser objeto de sufrir glaucoma. En cualquier caso, la prevención es la que juega un papel fundamental, por ello, quédate a leer 3 consejos para detectar a tiempo el glaucoma.

1- Revisar cómo nos sentimos

Es importante pararse a pensar cómo nos sentimos, en ocasiones, con la vorágine de la rutina del día a día no tenemos tiempo tan siquiera de ser conscientes de nuestros sentimientos y estado de salud. Por ello, una de las labores fundamentales es tomarnos el tiempo de revisar si nos encontramos bien y cuales puedes ser las causas. En el caso que nos ocupa, la detección precoz del glaucoma, no está claro cuáles son las razones de esta afección, pero pese a la creencia popular no surge por leer mucho, por usar gafas, ni por nada en lo que tengamos control, sin embargo, síntomas como la visión borrosa, dolor de ojos y cabeza, pérdida momentánea de la visión o mareos y nauseas pueden darnos una pista de esta dolencia.

2- Acudir periódicamente a revisiones con el oftalmólogo

Como ya hemos adelantado, uno de los imperativos en todo lo relacionado con la salud es la revisión periódica donde se nos realice un chequeo completo que nos descarte enfermedades que sean necesarias parar a tiempo. Desde la Fundación de Investigación del Glaucoma (Glaucoma Research Foundation), se indica que las personas con mayor riesgo de sufrir esta enfermedad se encuentran entre la etapa vital de los 35 años y entre todas las personas mayores de 60 años. Por ello, se indica desde este organismo, la revisión con dilatación de pupila incluida de los ojos, en un plazo de uno o dos años.

3- Mantener buenos hábitos de alimentación e higiene

Pese a que, como os hemos comentado, existe un factor inevitable de ser afectado por el glaucoma, el día a día influye y mucho en frenar esta enfermedad. Pequeños actos como la limpieza de los ojos y el evitado de poner a los ojos al alcance de sustancias irritantes, el cuidado por utilizar cosméticas adecuada, utilizar gafas de sol o evitar el frotado habitual son algunas de las circunstancias que incluir en nuestra rutina para decrecer el riesgo de padecer glaucoma. Asimismo, es importante cuidar la alimentación, nutriendo al cuerpo de las vitaminas y minerales necesarios para el buen funcionamiento del ojo, beber agua en abundancia, disminuir el consumo de sal y el estrés.